FRAMBUESAS RELLENAS A LOS DOS CHOCOLATES
Imprimir recetaINGREDIENTES
- 2 cajas de frambuesas
- 2 cajas de arándanos
- 1 tableta Nestlé postres de choco negro
- 1 tableta Nestlé postres de choco blanco
- hierbabuena
Aunque esta es otra de esas recetas que no merecen denominarse tal cosa, estas frambuesas rellenas a los dos chocolates son un bocadito dulce delicioso.
Sirven como postre, como detalle dulce para acompañar un café, para acompañar unas copas, para complementar una merienda estilosa o, simplemente, para coméroslas viendo una película y endulzaros un poco la vida, que, visto lo visto, no nos vendrá nada mal.
Esta es la segunda receta del mes para GADIS supermercados y allí encontraréis todo lo que he necesitado yo para perpetrarla.
Ahora bien, antes de contaros el paso a paso de esta no receta de frambuesas rellenas a los dos chocolates, os diré unas cosillas:
Vi varios vídeos de esos muy «cuquis», de esos en los que todo parece facilísimo y además, para colmo, no se mancha nada. Yo, que menos «cuqui» soy cualquier cosa, os voy a contar aquí las verdades del barquero y, ya de paso, a daros los trucos para que hacer esta deliciosa chorrada no os lleve más tiempo que guisar unos garbanzos a baja temperatura.
TRUCOS IMPORTANTES:
Tenéis que comprar 2 cajas de arándanos y 2 de frambuesas aunque sólo necesitemos 1 de cada. Hay que escoger las frambuesas más grandes y los arándanos más pequeños. Eso, lógicamente, facilitará bastante la labor de introducir el arándano en la frambuesa. Las frutas sobrantes, os las coméis sin complicaros la vida.
Es mucho más fácil añadir la hoja de hierbabuena al final del proceso, cuando saquemos la frambuesa del chocolate negro. Se pegará al chocolate aún templado y quedará mucho más limpia y bonita.
Hay que sumergir la frambuesa rellena de arándano en el chocolate blanco derretido, pero, importante, cuando este ya casi casi frío. Si no, se escurre y no hay manera de que la capa de choco blanco se quede medio pegada a la fruta.
Introducir los arándanos en las frambuesas, sin romperlas, lleva más tiempo del que parece.
Utilizar dos palillos para realizar este proceso, en los vídeos, me pareció limpio, fácil y cómodo, pero es todo lo contrario. Se os perderán las frambuesas en la marmita del chocolate. Como afortunadamente no vivimos en el poblado galo de Asterix, al menos no nos darán latigazos. Utilizad dos tenedores.
Las frambuesas, una vez rellenas y dispuestas muy monas ellas en una tabla, cobran vida propia, ruedan, caen al suelo y se espachurran, sobre todo cuando se pisan.
¡Avisados estáis!
Aproximado proceder:
(Salen unas 50 frambuesas rellenas)
Escogemos las frambuesas más grandes y los arándanos más pequeños e introducimos un arándano en cada frambuesa.
Yo también introduje, al tiempo que el arándano, una hojita pequeña de hierbabuena dentro de la frambuesa. Es mucho más fácil y limpio dejar esto para el final y añadir la hojita a la frambuesa recién salida del chocolate negro.
Derretimos los chocolates en el micro. Cada tableta en un bowl diferente y añadiendo 6 cucharadas de agua al choco negro y 4 cucharadas al choco blanco.
Introducimos primero el bowl del choco blanco y calentamos a media potencia removiendo bien cada 30 segundos hasta que se nos deshaga. Enfriamos en nevera.
Procedemos de igual forma con el choco negro. Dejamos enfriar a temperatura ambiente.
Comenzamos sumergiendo las frambuesas rellenas en el chocolate blanco casi casi frío. Es importante ayudarnos de 2 tenedores.
Las vamos colocando sobre papel de horno en una bandeja y las congelamos unos 20 minutos.
Una vez congeladas, y con ayuda de dos cucharillas o tenedores, sumergimos las frambuesas en el chocolate negro fundido, pero, en este caso, más bien templado y procurando que caigan «de pie» para que nos queden más bonitas.
Retiramos del chocolate colocamos de nuevo sobre papel de horno y sobre una bandejita.
Congelamos totalmente nuestras frambuesas rellenas a los dos chocolates. Una vez congeladas las guardamos en un recipiente adecuado o envasadas al vacío. Cuando las necesitemos, no habrá más que colocarlas en un plato o bandeja bonitos, descongelarlas ligeramente, y, ¡listas para disfrutar!
4 comentarios
Carmen seguro que es un bocado exquisito pero (siempre hay un pero) complicadito de hacer si eres tan poco hábil como yo.
A probarlas me apunto pero ( otra vez el pero) creo que esta vez no me animo. Un saludo.
Bueno, tras mi experiencia, creo que os doy alguna idea para simplificar el asunto. Asunto, que, con la trampa de los vídeos, parecía lo más fácil del mundo…
Una exquisitez seguro. Pero para cocinerasrelajadas y pacientes, no para manos de hiperactiva. Pero nunca se sabe si alguien voluntario en casa, con más paciencia que yo, se anima a echar una manita. La idea es de 10🥰😘
La idea no me pudo parecer mejor y los vídeos parecían de dificultad nivel preescolar, pero nada más lejos de la realidad. Yo siempre digo la verdad y hago fotos de verdad, así que avisados estáis, Chusa. Y gracias por comentar