CHOCOS EN SU TINTA

CHOCOS EN SU TINTA

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Comensales: 4 Tiempo de preparación: 15M Tiempo de cocinado: 90M

INGREDIENTES

• 2kg de chocos
• 100ml de vino EIDOSELA SELECCIÓN
• 2 cebollas
• 2 pimientos verdes italianos
• 1 pimiento rojo
• 3 dientes de ajo
• 6 paquetitos de tinta congelada
• 1 cucharada de Maizena
• 2 hojas de laurel
• aceite virgen, pimienta blanca y sal

Pocas recetas más marineras y más tradicionales que esta de chocos en su tinta. Normalmente apreciamos más el calamar que el choco o sepia, pero a mí, personalmente, para guisar me gusta mucho más  este último. Es más consistente, más grueso y me parece  más adecuado para estos cocinados más largos.

Si, además, a nuestro sofrito de cebolla, ajo y pimientos bien caramelizado le añadimos un buen chorro de vino SELECCIÖN (100% Albariño) de BODEGAS EIDOSELA para desglasarlo, el resultado será un guiso de chocos en su tinta aún más rico, más atlántico y más marinero, independientemente del lugar donde lo perpetréis.

Y sin mucho más, vamos al lío que no es mucho. Pero si queréis amortizar mejor tiempo y dinero, haced más cantidad de esta delicia y congeladlo. Los chocos guisados llevan la congelación estupendamente.

Aproximado proceder:

Cortamos muy menudos: 2 cebollas, 2 pimientos verdes italiano y 1 pimiento rojo.

En la tartera donde vayamos a guisar ponemos un fondito de aceite virgen y pochamos en el las verduras. Salamos, y a los 5 minutos de comenzar el pochado añadimos el ajo picadísimo.

NOTA: para ahorrar tiempo y aceite (calorías y dinero) yo siempre introduzco la verdura, ya picada, en un recipiente adecuado, durante unos minutos en el microondas. En este caso fueron 8 minutos porque el sofrito era bastante cantidad.

Pochamos muy bien la verdura y cuando la tengamos bien pochadita, añadimos el vino y dejamos que con él se desglase todo el fondo de la tartera.

Añadimos los chocos limpios y cortados en trozos. Los doramos bien durante unos 15 minutos revolviendo bien para que no se peguen.

A continuación, añadimos  la salsa de tomate ya hecha, la pimienta blanca, la sal y un par de hojas de laurel. Mezclamos todo bien.

En un vasito con un poco de agua fría  disolvemos una cucharada rasa  de Maizena y la tinta de los chocos, ya sea la tinta propia o de sobrecitos congelados. Integramos todo.

Es el momento de añadir un poco de agua al guiso. La justa para que haya líquido pero que no cubra los trozos de choco. Tapamos, bajamos el fuego y dejamos cocinar unos 40 minutos. Hay que ir  removiendo bien desde el fondo y de vez en cuando para que no se agarre el guiso. 

Pasado ese tiempo comprobamos el punto de sal y el de cocinado del choco. Si ya está blando, estaremos listos para disfrutar de esta delicia.

Como acompañamiento, el típico arroz blanco, unas patatas cocidas o unas patatas fritas y, por supuesto, mucho pan para mojar en la salsita.

Y recordad, que este guiso congela estupendamente. Así que, si os vais a pasar cierto trabajillo,  amortizadlo haciendo raciones extra para congelar que otro día os salvarán la vida.