MERLUZA A LA ROMANA RELLENA

No sé si esta merluza a la romana rellena, tendrá el mismo éxito que la entrada más vista de mi blog,  «merluza a la romana como Dios manda», pero desde luego, los trucos que os voy a dar hoy para que consigáis la merluza frita perfecta, van a ser los mismos.

Para variar, en esta ocasión hice la merluza a la romana rellena. Rellena con unos pimientos del piquillo caramelizados que le dan un toque dulzón que hay que compensar con otro toque ácido.

La dificultad de la receta es mínima y los trucos, os aseguro que, si aún no los conocéis, los vais a repetir tanto cuando hagáis vuestra merluza a la romana rellena, como cuando la hagáis sin rellenar.

¡Ah!, y precisamente el relleno de esta  merluza, puede hacer que este plato  le guste, incluso,  a los niños de la liga antipescado.

La única dificultad de este plato es encontrar un pescader@ que os limpie y prepare bien el pescado. Ese asunto, yo, lo soluciono comprándolo en la pescadería de mi supermercado GADIS más cercano.  Allí me preparan siempre el pescado como yo quiero y siempre me lo dejan impecable. En este caso, pedí los dos lomos de la merluza limpios y sin piel y así me los dejaron.

 

Y antes de nada: ¡TRUCOS!

1. El truco más básico y esencial en este plato, es el corte de la merluza.

En mi opinión, que es personal y por supuesto ni es doctrina ni  pretende serlo, una merluza no se debe freír en «modo rodaja». La merluza debe freírse en «modo lomo». Seguro que hay miles de teorías al respecto, pero si sois de freír en «modo rodaja», pasaos al «modo lomo» en versión limpita, y luego me contáis. Que por probar tampoco se pierde nada…

2. Es importante  no pasarse en el punto de la fritura.

En el caso de estos lomos dobles,  yo creo que debieron estar como 2 minutos   por cada lado y a una temperatura de grado 7 sobre los 9 que tiene mi cocina.

3.  Y el reposo con tapa. Algo que casi nadie hace y que en mi opinión  distingue a una merluza bien frita de otra del montón, es colocar los trozos de merluza ya frita  sobre papel absorbente, dejándolos reposar y «sudar» bien tapados durante unos 5 minutos. Eso permite, además,  que el cocinero pueda freír la merluza  antes de comer y dejarla reposar mientras se sienta a la mesa con todo el mundo y disfruta también de la comida y la compañía.  

Aproximado proceder:

Con los dos lomos ya limpios de la merluza, ponemos uno sobre otro, de forma que queden la parte mas gruesa del lomo de abajo con la más fina del lomo de arriba, es decir, que los lomos queden lo más encajados posible.

Una vez tengamos un lomo encajado sobre otro, cortamos los trozos en raciones. Tened en cuenta, que las raciones serán dobles, así que valoradlo al cortar.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En cuanto tengamos las raciones hechas y emparejadas, las secamos bien con papel de cocina absorbente.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Levantamos el lomo superior de cada ración y ponemos los pimientos caramelizados IBSA sobre el trozo inferior. Volvemos a colocar el trozo que retiramos, formando un sandwich de pescado cuyo relleno son los pimientos caramelizados.

Rociamos el pescado con zumo de lima (para compensar el dulzor de los pimientos) y salamos.

Batimos 2 huevos en un bowl y en otro disponemos la harina.

Ponemos una sartén al fuego  con abundante aceite de oliva a calentar.

Pasamos los «sandwiches» de pescado por la harina y los apretamos un poco para sellarlos bien.

Cuando el aceite esté caliente, pero no arrebatado,  pasamos rápidamente el pescado por el huevo y lo sumergimos en la sartén. Dos minutos por cada lado serán suficientes para que la merluza quede hecha, pero jugosa.

Según vayamos retirando de la sartén el pescado frito  lo ponemos sobre papel absorbente y lo cubrimos para que sude bien. Las tapas de plástico para calentar al micro son estupendas para esto.

Dejamos reposar el pescado tapado  5 minutos y servimos. Ya veréis como con este reposo os queda mucho más jugoso y, lo que aún es mejor, no tenéis que estar friendo vosotros el pescado mientras otros comen…

Para acompañar a este merluza a la romana rellena, una simple ensaladita y algo que le da mucho chiste: un poco de mayonesa en el plato y  ralladura de lima sobre todo ello. 

Animaos a probad así la merluza, o por lo menos, a probarla  a la romana pero con los trucos que aquí os cuento para rebozarla como Dios manda…¡Y  ya me contaréis!