La receta de hoy de, mejillones al vapor con gracia, se lleva el premio del «facilón y lucido», ¡pero con creces!
Pocas cosas más sanas, más deliciosas y más económicas que los mejillones. Si además son de las rías gallegas, ya ni os cuento…
Y no sé si tenéis la misma sensación que yo, pero me da la impresión que ni los apreciamos, ni los valoramos, ni los utilizamos como se merecen, ¿no?.
Estos mejillones al vapor con gracia, son eso: unos mejillones al vapor con un extra, la gracia, que hasta un parvulito podría añadir.
Como nota, deciros que yo los mejillones los abro al vapor poniendo simplemente en una tartera los mejillones limpios. Es decir, no añado, agua, ni vino, ni laurel, y, por supuesto NADA DE SAL.
Probad a hacerlos así ya veréis como están salados de sobra. Además, soltarán ellos su propio jugo, jugo que, convenientemente colado, es un fumet delicioso para añadir a cualquier guiso o arroz de pescado.
Lo único que hay que hacer es limpiarlos bien en el fregadero y con ayuda de un cuchillito, tirar de las barbas para arrancarlas.
Los mejillones de la receta de hoy, como podéis apreciar en la foto, son de supermercados GADIS. Allí los compro siempre porque los tienen buenísimos.
Aproximado proceder:
Una vez limpios los mejillones, los introducimos en una olla con tapa y los ponemos al fuego. Veremos que pasados 2 o 3 minutos se irán abriendo ellos solos.
Vamos retirando los que se abran y les arrancamos media concha para dejar la vianda del mejillón en la otra mitad.
Colocamos en una fuente las conchas con la carne del mejillón y vertemos sobre ellos un chorrito de aceite de oliva virgen. El que utilizo siempre en mi cocina, porque me encanta para ensaladas y aliños, es la variedad picual de la marca gallega de aceites, ABRIL
Aderezamos los mejillones con pimientas molidas, y, lo más importante, los cubrimos con fina ralladura de lima.
Veis que con tan sólo aceite virgen, pimientas molidas y ralladura de lima, conseguimos dar un toque diferente a algo tan nuestro y tan sencillo como un mejillón al vapor.
Animaos a probarlos así, ¡y a ver que os parecen!.
Y si queréis introducir más mejillones en vuestra vida y en vuestra dieta, espero que estas otras tres recetas os gusten lo mismo que a mí.
3.Mejillones en vinagreta oriental y tal